La Policía detuvo este miércoles a los sospechosos y cómplices por la amenaza a Ángel Di María y su familia. Pero esas capturas son apenas la punta del hilo del caso. La Justicia cree que detrás del ataque, que incluyó disparos frente al country donde viven parientes del jugador de la Selección, se encuentran presos de alto perfil por el narcotráfico.
A Ezequiel Acotto (35), principal apuntado por las amenazas, lo capturaron cuando salía acompañado de una pareja de una vivienda en Rosario, este miércoles a la madrugada. Lo atraparon con un bolso en el que llevaba 125 gramos de cocaína.
De hecho, a Acotto ya lo investigaban en un caso por narcotráfico.
Una de las escuchas es clave para el caso. Se trata de una comunicación entre Acotto y una mujer identificada como Tamara. Allí, él confiesa ser el autor de las amenazas y asegura que trabaja para «gente de arriba», según Rosario 3.
Por eso, en las últimas horas la Justicia hizo una serie de allanamientos. Uno de esos procedimientos se realizó en la cárcel de Piñero, donde se encuentran alojados presos de alto perfil. Ocurrió en la celda de Dylan Cantero, hijo de Ariel «Viejo» Cantero, el fundador de la banda Los Monos.
«La requisa la hizo la Federal. No encontraron nada. No encontraron celulares«, dijo una fuente de Rosario.
Pero eso no descarta que Cantero haya sido el ideólogo de la intimidación contra Di María y la familia. Las nuevas sospechas apuntan al uso de un teléfono fijo.