No deja de ser extraño verlo en el banco. Por más que sea una imagen que esta Selección supo mostrar en otras ocasiones y, lo más importante, también asimilar (ayer volvió a pasar, hizo la diferencia antes), que Lionel Messi sea suplente es, a todas luces, algo antinatural.
Ante Ecuador, Leo entró recién a los 10 del segundo tiempo por su amigo Di María, se llevó la mayor de las ovaciones y mostró, en el rato que le tocó jugar, que su voracidad no reconoce amistosos ni tiempo en cancha.
Messi no tuvo un súper ingreso. Sin embargo, la preocupación que les genera de por sí a sus rivales, ese toque a velocidad luz para jugar y descargar, esa sensación de que con él en cancha todo puede pasar en cualquier momento y en cualquier lugar, permanecen inalterables. Aun cuando ni siquiera esta vez tuvo un remate al arco franco, porque el único que intentó enseguida fue bloqueado por un defensor, el 10 argentino es una amenaza.
Que la Selección haya mostrado el mejor pasaje en el partido sin él también es una confirmación de esa independencia futbolística del 10. Un logro que el otro Lionel, el que lleva el buzo de DT, también supo conseguir en este ciclo inolvidable. Cuando Leo entró, Argentina ya había ganado el partido ante Ecuador. Por eso, tampoco hizo falta que el capitán sacara su varita.
Pero si de voracidad se trata, Messi marcó con algunos de sus gestos que no le da lo mismo entrar y no convertir. O puesto en contexto del partido de ayer, entrar y no ser protagonista. Por eso, fue tendencia en redes por su reclamo a Nico González, por una jugada clara que, en el final del partido, el de la Fiorentina definió sin éxito y sin mirar que el 10 le picaba a toda velocidad por derecha.
“La gente lo va a ver”, había prometido Scaloni en la conferencia previa. Y cumplió. Fueron casi 40 minutos en total, sumando el adicional. Suficiente para que dos chicos se colaran en la cancha buscando tocarlo (y sacarse la foto imposible) o para que Kendry Páez, el volante ecuatoriano de sólo 17 años años, se llevara el regalo de su vida: la celeste y blanca con la 10 del capitán campeón del mundo.
Lionel lo cuidó y Lionel reguló. No es un juego de palabras, sino una realidad de lo que se vio ayer en Chicago. Messi sabe que lo importante será a partir del 20, cuando comience la Copa América. Y que allí, una vez más, irá por la gloria…
El resumen de la victoria de Argentina
Selección Argentina –
El resumen de la victoria de Argentina ante Ecuador
El arranque de Leo en el banco.
Leo y Nico González tras el partido (AP). 
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