Todos los hogares tienen madera en sectores internos o externos. Desde muebles, mesas, sillas u otras construcciones, la madera es uno de los elementos que nunca faltan en ninguna casa, por lo que es fundamental saber cómo curarla y mantenerla. Para ello, el uso de aceites es una gran opción.
En tanto, el aceite más recomendado es el de linaza. Se trata de un material de origen natural que se extrae luego de prensar semillas de lino y sirve para restaurar y reparar la madera. El líquido tiene una apariencia viscosa y tiene un color amarillo dorado.
Por otro lado, el aceite de linaza no cambia el color de la madera, simplemente resalta sus vetas de una manera muy natural y resulta ideal para prácticamente cualquier mueble de madera, ya sea antiguo o recién fabricado. Le dará un tacto liso, sedoso, satinado y elegante.
A diferencia del barniz, productos naturales como el aceite de linaza permiten que la madera transpire sin que penetre humedad ni suciedad. Sin embargo, hay distintos tipos.
- Aceite de linaza crudo: no recibe ningún tratamiento posterior y es 100% natural. Es la clase de aceite que mejor penetra en la madera y mejor la cubre. La única desventaja es que tiene un tiempo de secado muy prolongado.
- Aceite de linaza crudo con secantes: es el más común para trabajar sobre madera y se seca en cuestión de horas. Tiene muy buena capacidad de protección y nutrición.
- Aceite de linaza cocido: las semillas de lino se prensan a una temperatura superior a los 280°C. Tiene poca penetración pero sirve para evitar los hongos.
Madera: cómo aplicar el aceite de linaza
Se trata de un procedimiento sencillo para el que solo se necesitará una brocha o un paño. Lo primero que hay que hacer es limpiar bien la superficie de madera sobre la que se va a trabajar, dejándola libre de polvo y suciedad. Para ello, lo más recomendable es lijar la madera antes de la aplicación.
Luego, siempre hay que leer las instrucciones del producto, ya que cada aceite puede tener indicaciones de aplicación distintas. En algunos casos, por ejemplo, pueden llegar a indicar que se mezcle el aceite con aguarrás.
Llegado el momento de aplicar el aceite hay que hacerlo en la dirección de la veta, de manera continúa y sin detenerse para lograr un acabado uniforme. En el caso de una superficie plana es recomendable usar una brocha, mientras que en el supuesto de una pieza con formas curvas es mejor hacerlo con un paño.
Generalmente, se recomienda una aplicación de tres capas para lograr una mejor nutrición de la madera. De ser muy espeso, puede calentárselo en baño maría para que la aplicación sea más sencilla. Los tiempos de secado (en el caso de los aceites con secantes) pueden variar entre 12 y 24 horas.
La madera también puede protegerse con otros productos como impermeabilizantes, lasur, barnices y aceites como el de teca, lino y de tung. En el caso de muebles de exteriores, también se recomienda cubrirlos con lonas impermeables.